lunes, 8 de abril de 2013

George Grosz y su obra "Metrópolis"

Hoy, en clase, hemos podido poner en práctica todo lo que expuse en mi última entrada ("Ver y oír una imagen"); siguiendo el esquema de fase descriptiva, fase interpretativa, fase emotiva y fase analítica, pudimos sacar diferentes conclusiones de la obra "Metrópolis" de George Grosz relacionadas con las cuestiones ¿qué vemos objetivamente en la imagen? ¿qué creemos que nos ha querido comunicar el autor de la obra? ¿qué sensaciones y emociones nos transmite la obra al observarla? y por último, ¿ cómo ha organizado el autor los diferentes elementos del cuadro ( color, organización del espacio...) para transmitir el mensaje? Tras realizar este breve análisis, podemos obtener unos resultados bastante positivos, y además de gran ayuda, en mi opinión, ya que vemos cómo este "esquema" para observar y comprender una imagen es algo factible para llevarlo a una clase, y mostrar a los niños cómo el analizar una imagen es más sencillo de lo que parece, y aprender a usarlo para poderlo emplear en diferentes situaciones de nuestra vida, ya que, como ya he dicho varias veces, la mayoría de la información que recibimos nos llega de manera visual, a través del sentido de la vista. 

Pues bien, después de esta pequeña introducción, me gustaría hacer un breve resumen de todo lo que comentamos en clase sobre dicho cuadro, aparte de alguna información que he obtenido de diferentes páginas web, como por ejemplo la del Museo Thyssen, donde se encuentra este cuadro.
En primer lugar, me gustaría hablar un poco del autor del cuadro, George Grosz. Se trata de un pintor alemán, relacionado con el mundo del expresionismo. Lo que más me gustaría comentar de este pintor es la gran influencia que tuvo el estallido de la Primera Guerra Mundial en su vida, algo que podemos ver claramente en desarrollo de su producción artística, donde se puede apreciar un cambio hacia unos obras caracterizadas por una expresión mas violenta y decidida, centrándose ya en temas más sociales y políticos; podemos decir que la experiencia de pasar por esta guerra, le llevó a crear más escenas sobre la destrucción y la muerte, donde muestra también las condiciones de vida que se dieron en la Alemania posterior a esa Primera Guerra Mundial, y cuando se acerca a la Segunda Guerra Mundial, vemos como va adquiriendo un gran tono de desesperación y de grito, cosa que Grosz quiere reflejar en la obra comentada "Metrópolis", de 1916-1917. Como comentario de dicha obra me gustaría decir, ya desde el principio, lo que intenta reflejar el autor, ese ambiente de inseguridad producido por la locura que se había apoderado de la sociedad europea. 
Centrándome primeramente en el color, decir que se da una gran predominancia del tonos rojos y negros, provocando una sensación de velocidad, violencia, aumentando la tensión de la escena. Respecto a la perspectiva, vemos claramente una perspectiva oblicua , muy marcada por ese edificio central colocado en una esquina, dando lugar a esas dos calles que recorren su fachada; y, al mismo tiempo, la perspectiva oblicua viene marcada muy bien también por la gran farola que aparece en primer término, para indicar probablemente el centro de la plaza, situada justo en frente de la esquina de dicho hotel. Gracias a esta perspectiva oblicua, con esas diagonales, el autor consigue transmitir esa sensación de movimiento y dinamismo, así como, sobretodo, ese caos y confusión. 
Esquema infográfico de la composición en Metrópolis.


Algo a destacar también del cuadro son los personajes, los diferentes "tipos de personajes" que aparecen y su organización dentro de esas ciudad que el autor representa. Se da un entrecruzamiento de todos los personajes, llegándose a confundir unos con otros, observable sobretodo en el primer plano, donde se podría decir que todos los individuos avanzan con paso rápido sin saber hacia donde ir la mayoría de las veces, se suele decir que se asemejan a almas en pena, personajes fantasmales, que han perdido toda la esperanza posible en sus vidas. Cabría decir que existe una gran falta de proporción entre unos personajes y otros, se observan personajes de distintos tamaños, cosa bastante apreciable, en mi opinión. Una de las cosas que me llamó bastante la atención y que he podido leer y corroborar en varios sitios, es que existe la idea de que Grosz quiso representar a la mismísima Muerte con la figura más grande de todo el cuadro, que aparece detrás de la farola central, ya que se dice que, disimuladamente, su rostro se asemeja al de una calavera, y además, es la única figura que muestra una actitud, no camina simplemente hacia un desconocido rumbo, sino que parece que está planeando hacer algo con esa especie de paño que tiene entre las manos imitando la característica guadaña que lleva siempre la Muerte, esa muerte que muchas veces vemos como la tenemos detrás de nosotros, amenazando con llevarnos con ella, y nosotros sin darnos cuenta si quiera. 
Por último, me gustaría mostraros algo que dijo el famoso "médico neurólogo" Sigmun Freud  en algún momento de su vida, que me ha llamado mucho la atención y que creo que viene muy bien a la hora de dar un pequeño reflejo de la obra comentada: "Pero después de haber errado sin guía durante algún rato, me encontré de pronto en la misma calle, donde ya comenzaba a llamar la atención; mi apresurada retirada sólo tuvo por consecuencia que, después de un nuevo rodeo, vine a dar allí por tercera vez. Mas entonces se apoderó de mí un sentimiento que sólo podría calificar de siniestro, y me alegré cuando, renunciando a mis exploraciones volví a encontrarme la plaza de la cual había partido"




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